La esencia de los sueños, el cielo resguardando momentos buenos, la fuerza de la magnitud del universo, la ternura alojada en la fragilidad de un verso, la belleza que conmueve corazones, la pasión del ser, la igualdad de las razones, la sonrisa que extermina la violencia, el amor que alimenta y enriquece la conciencia, el abrazo que da brillo a la soledad, la lealtad en la amistad acompañando la eternidad, la creatividad, el calor de la hermandad, la ternura del don de la maternidad, la valentía de mil seres, de ilusiones, de esperanza, de amaneceres, tan dulce timidez, la desnudez de un alma, el encanto que trae consigo la calma… la esencia en cada sueño, en cada deseo, en cada momento bueno que poseo… los recuerdos, la poesía… el respeto arropando tus días… el amor eterno que merecías. El final de mis días, tinta y sangre devorando mis alegrías, entre noches frías, las palabras que me decías, el cariño con el que me protegías.
El instante que desfiguró mi alegría... discúlpame por marcharme... en silencio... sin luz... ni guía.